Ubud ya parece más Bali.

A veces poder llegar de una ciudad a otra, cuando estas están cercanas, es más difícil que hacerlo de punta a punta de una isla, y este es el caso que nos pasó para ir desde Kuta hasta Ubud que se encuentran a menos de 40 kilómetros de distancia.

Salimos del hotel de Kuta con la ruta prederteminada sabiendo que debiamos cambiar de bemo público, minifurgoneta, 3 veces, pues no hay linea directa a no ser que uses buses turísticos. Tras caminar un cuarto de hora por Kuta cogimos el primero hasta la estación de Tegal.

Una vez allí debiamos ir a Batubulan, pero nos dices0n los chófers que no, que primero hay que ir a Ubung y de ahí a Batubulán...ya empezamos. Tras discutir un montón y viendo que no habia más remedio nos subimos dirección Ubung, para de allí cambiar a otro bemo esta vez sí a Batubulán.

Llegando a esta estación, todas las anteriores son terminales de bemo en Denpasar, vemos el que va hacia Ubud, nuestro destino final, estaba vacio y nos piden 50.000 a cada uno por un trayecto que de normal no vale más de 20.000....allí ya me pillo calentito de tanto ajetreo y regateo y exploté...en castellano, claro, jajaja....

El grupillo de locales que corria por allí se reian de la situación, y nosotros de ellos, claro...tranquilos no hay prisa, esperaremos a más gente.Salí a la carretera a ver si pillaba algún otro bemo pero nada. Al volver veo que junto a Carol hay otra pareja, españoles!!!. Seguiamos con las mismas con el jefe del cotarro ya que nos dice que 40.000 porque  somos 4....que nooooooooo!!!!!...20.000 y vas que arreas.... la otra pareja viendo  lo que allí se cocia nos miraba con cara de susto, pero acordamos no subir de esa cantidad. Viendo nuestro plan el colega fué bajando a 35, luego 30, luego 25...y al final ok, 20.000 pero os vais con otro conductor; menuda mafia, y encima queria cobrar por adelantado, jajajaja.

La verdad es que entre charlas el camino se nos hizo corto y llegamos a Ubud, pero los listos nos la jugaron; quedamos en parar en el mercado del centro, pero nos dejó a 2 kilómetros.....bueno, una de cal y otra de arena.

A medio camino hacia los hostels respectivos nos despedimos de nuestros compañeros. Llegamos al hostel nos instalamos y nos relajamos un rato en la terraza...nos hacia falta.

Salimos luego a comer algo, eran ya más de las 4 y a comprar fruta para la cena. En  nuestro primer contacto con Ubud, capital cultural de Bali, lo primero que vimos es que hay muuuuuuuchos turistas, muuuuuchas tiendas y restaurantes, y muuuuucha gente ofreciendose como taxistas....que pesadez.

Ubud reune muchas cosas que el turista busca en Bali además de playa y surf: grandes terrazas de arroz por las afueras, artesania en madera, ropa, buena gastronomia ( y cara), museos, templos hindús balineses,....pero eso comporta gente y gente, motos y motos por todas partes, suerte que nuestro hostel está en una zona muy tranquila.

Curiosas son muchas de las viviendas y alojamientos de Ubud, pues disponen de templos propios, y delante de ellos siempre hay pequeñas bandejitas con ofrendas y flores...las calles están llenas también de ellas pues la gente de tiendas y bares también las ponen.

Nuestra sorpresa de la tarde fué encontrarnos a la pareja alemana de los volcanes, sí, sí la lider-borde!!!...buenísimo, porque lo primero que hicieron fué disculparse porque se fueron al llegar al ferry sin decir ni adiós. Charlamos de nuestros dias por Bali y andamos un rato juntos por Ubud. Vimos que ella tenia unas erupciones por todo el cuerpo y Carol le preguntó; nos dijo que llevaba así dos dias pero no se habia tomado nada, con lo que fuimos a comprar unos antiestamínicos que Carol le recomendó, lo agradecieron mucho y nos despedimos de ellos.

Volvimos al hostel a programar los dias que nos quedan por Bali,....es  cierto, estamos continuamente con lo mismo, pero es que hay tanto a ver y organizarse es importante, asimismo adelantarse a ciertas cosas sobretodo burocráticas pues en algo más de un mes volamos a Nueva Zelanda con escala en Australia y hay unos requisitos de visados etc. que no podemos dejar de lado.

Nos cenamos la pezado sandia que compramos por la tarde y a dormir.

La mañana ha empezado desayunando en nuestro porche, pues no hay zona común o comedor en el hostel y ha seguido buscando información como ayer. Ya a media mañana nos hemos calzado las botas y de paseo.

A las afueras de Ubud hay un camino que lleva por una zona de terrazas y arrozales, rodeadas de palmeras, casitas,riachuelos.....idílico. Por el camino, además de econtrarnos con más gente, hay pequeños bares, casetillas de pintores y artesanos, todo ello dedicado a los turistas que por allí pasan. En uno de ellos habia un matrimonio, él vendiendo sus pinturas y ella haciendo bisuteria de plata. Nos hemos puesto a ver sus piezas y hemos acabado tomando un café con ellos y de charla, las vistas y el entorno una maravilla,...esto empieza a parecerse a lo que esperabamos de Bali.

Siguiendo camino hemos ido pasando por más campos de arroz: unos los estaban preaparando para plantar, otros ya con los granos apunto, otros donde ya estaban recogiéndolo, algún curioso espantapájaros y otros llenos de patos, jajaja....y nos hemos encontrado a la pareja de ayer del bemo. Ubud es un pañuelo.

El paseo ha sido muy bonito y relajante, aunque caluroso a esas horas. Ya de vuelta a Ubud hemos ido a ver el Palacio, donde aún vive parte de la familia real, algunos templos desde fuera y el mercado de artesania y souvenirs....nos hemos comprado un pareo balinés, Carol siempre dice: que pena no poder comprar nada más, no nos cabe!!!.

Tras un rato de descanso en el hostel hemos salido a cenar a un warung, local de comida típica balinesa, donde hemos cenado genial y bien de precio. Al salir...sorpresa de nuevo, otra vez nos hemos encontrado a la pareja alemana....jajaja...cada vez son más simpáticos, incluso nos han dicho sitios donde ir por la zona de Ubud que ellos habian visitado en el día de hoy.

Ya de nuevo en el hostel, piña de postre que compramos ayer y a dormir. Mañana nos  vamos 4 días de aventurilla por la zona noreste de Bali: templos, montañas, volcanes, publecitos de pescadores,...y lo que la suerte nos depare, sabemos donde queremos más o menos ir pero no tenemos nada programado ni reservado...sólo sabemos que el día 15 volvemos a dormir a Ubud.

A la vuelta os explicamos todo!!!.