Dos meses y un día han servido para recorrer una gran parte del norte de India. Empezamos por la montañosa y tranquila Sikkim para acabar en la bulliciosa capital, Delhi.
Han sido semanas de altibajos en nuestras sensaciones y vivencias. Nos llevamos un gran recuerdo, como no, de haber visto lugares únicos y especiales, y a su vez haber vivido situaciones que no se nos olvidarán. De haber conocido algo más de la cultura y sobretodo la religión, algo tan presente en este país.
Hemos conocido también a gente muy interesante por el país, tanto locales como extranjeros, aunque no podemos dejar de lado el aspecto quizás menos positivo, por no decir negativo que suena mal, del día a día que ha sido lidiar con conductores de tuctucs y ricksaws en algunas ciudades. Su insistencia continua, su intentar engañarte y sus mentiras nos han llevado al límite algunas veces de la paciencia, y acaban dando una imagen del país que tampoco es la real.
Para Carol era su segundo viaje a India, el anterior fué al Sur y dice haber visto una India muy diferente. Mi primera vez en este país ha acabado siendo mejor de lo que me esperaba a cuanto a que no ha sido tan duro como pensaba el movernos en trenes llenos de gente, transitar por ciudades bulliciosas, y sobretodo por la suciedad en muchas de ellas. Creo que los meses de viaje anteriores han hecho ver todo de otra manera.
¿ Volveriamos a India?. Coincidimos los dos en que a algunas zonas , por ejemplo del Rajastán no,; algunas ciudades no son tanto como pensábamos por lo leido. Otras nos han encantado: las montañas de Sikkim, la autenticidad de Calcuta, los paisajes de Sundarbans, la magia de Varanasi, la belleza del Taj Mahal, la calma de Orchha, los fuertes de Rajastán, la ciudad azul de Jodphur y sobretodo la gran experiencia que vivimos como voluntarios en el hotel de Bikaner.
De todas formas para una nueva visita a India nos quedan muchas zonas nuevas que no conocemos, osea que nunca se sabe...Namasté India....nos vamos a Borneo!!!!!.
No hay comentarios:
Publicar un comentario