Tras la parada en Las Vegas nos quedan por delante 8 días en los que vamos a recorrer varios parques naturales y cañones por Arizona, Nevada y Utah antes de regresar el día 15 a Las Vegas para al día siguiente volar a Mexico D.F. y visitar a nuestros primos Eva y Paco y por fín conocer a su hijo Alvaro!!!.
Tras recoger el coche en el aeropuerto, esta vez de nuevo un cochazo, pusimos rumbo hacia las afueras de Las Vegas bajo un sol de justicia y un calor de más de 40 grados.
La gran presa Hoover fué la primera parada. Construida entre 1.931 y 1.936 en el curso del rio Colorado justo en la frontera entre Nevada y Arizona es un lugar visitado por más de un millón de turistas cada año y es la presa más grande del hemisferio oeste. Es famosa también por aparecer en varias pelis como Transformers así como videojuegos y aguas arriba ha creado el Lago Mead que vimos desde un mirador.
Para llegar hasta Williams, donde hicimos noche circulamos durante un par de horas por la mítica Ruta 66 que aunque en muchos tramos ha sido absorvida por autopistas aquí mantiene su trazado típico de grandísimas rectas, pocas casas y sus típicos letreros. Aunque no somos moteros no podiamos dejar de transitar por un lugar tan mítico.
Tuvimos una bonita puesta de sol durante la marcha hasta llegar a Seligman donde paramos a cenar en el Westside Lilo s Cafe, un conocido bar de carretera donde nos comimos unas hamburguesas increibles en un ambiente muy típico que nos encantó.
El motel de Williams no podia ser menos y siguió la linea del típico motel de carretera en estos pueblos de Arizona, pero muy limpio y cuidado, además la familia que lo lleva son mexicanos, osea que nos entendimos a la perfección.
Por la mañana antes de salir dimos una vuelta por la calle principal de este pueblo sacado de las pelis del Oeste antes de emprender las 50 millas que nos separaban del Gran Cañón del Colorado.
Cuando llegamos pagamos el pase ( hemos comprado uno anual que nos sale más a cuenta que pagar en los otros 3 parques nacionales que queremos visitar) y fuimos directos al Centro de Visitantes a buscar información de rutas.
En los meses de más afluencia de turistas una de las rutas principales con las mejores vistas del cañón sólo se puede hacer através de un servicio interno de autobuses, que la verdad sea dicha, es ideal y comodísimo además de entrar en el precio de la entrada.
De esta manera bajamos y subimos cuantas veces quisimos entre los diferentes miradores y otros los hicimos andando junto al cañón, algo muy recomendable a pesar del calor.
Sobre el Gran Cañón podria mos daros muchos datos, historia, etc. pero es más fácil deciros que es BRUTAL, ALUCINANTE, GRANDIOSO, .... no hay adjetivos suficientes para describirlo, solamente hay que asomarse en uno de sus miradores y pasar rato y rato mirandolo. Es tal su magnitud que con una sola mirada no se abarca, debes ir girando la cabeza a derecha e izquierda y por mucho que mires y mires no te cansas de ello.
Estuvimos recorriendo varios miradores con difefentes prespectivas, montones de colores de los rojizos a los verdes, lineas de erosión que parecen marcadas a cuchillo, aves sobrevolando el cañón y un cielo azul entre sol y nubes; en muchos tramos estuvimos solos, como por ejemplo en varios tramos que bordeamos el cañón así como cuando paramos a comer nuestro picnic.
Por la tarde recorrimos, ahora sí en nuestro coche , el lado Este y varios miradores hasta llegar al Desert Point donde estuvimos viendo una increible puesta de sol junto a la torre de piedra. Fueron en total 7 horas de visita en este acceso Sur del Gran Cañón que nos pasaron volando y colmaron las enormes ganas que tenia de verlo y a Carol pese a ser la segunda vez que ha ido ha descubierto otra manera de verlo y le ha vuelto a encantar.
Nos quedaba entonces un buen tramo de 2 horas de carrerera hasta Page con la idea de que si encontrábamos donde dormir antes quedarmos a hacer noche allí, pero nada, sólo pasamos por un hotel en Cameron que estaba lleno osea que hasta Page que fuimos.
9.30 h. de la noche empezamos a recorrer hoteles preguntando por habitaciones, sabiendo además que eran muy caras porque lo habiamos mirado por internet. Resultado : todos llenos y el único que tenia algo libre nos pedia 140$!!!. Osea que no habia elección, y tras cenar dormimos en el coche en una callecita donde habian varios moteles pequeños. Estiramos los asientos, ventajas de coche grande, y a dormir.
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