Ya estamos en Camboya!!!

Nuevo madrugón para que a las 6.30h nos recoja, junto a otros turistas, un minibus que nos lleva hasta el embarcadero donde ayer contratamos el pasaje a Camboya.

Antes de ir hacia la frontera subimos a una barca que nos lleva a una pisifactoria que hay en unas casas flotantes frente a Chau Doc. Las casas flotantes tienen bajo ellas unas pisifactorias donde crian y engordan pescado en su mayoria para exportar. Nos explicaron algunas curiosidades y les dieron de comer para que vieramos el montón de peces que hay en cada una.

De nuevo a la lancha para en 5 minutos llegar a la aldea Cham, donde convivien en armonia budistas y musulmanes en el mismo pueblo. Dimos una vuelta, vimos las mezquitas, y la vida de aquellas gentes, que nos recordó mucho al ambiente de la Isla de An Binh.

Y ya desde ahí a toda máquina en la lancha rápida dirección frontera fluvial Vietnam-Camboya, donde llegamos en hora y media. Desde la parte exterior trasera de la lancha fuimos viendo el grsn paisaje que ofrece el rio Mekong y su ribera. Pescadores en sus barquitas, grandes campos de arroz, huertas y maiz, barcos de mercancias, pequeños poblados,...una maravilla. Y que decir de estar navegando por el rio Mekong, uno de los rios más largos del mundo que pasa por 7 paises.

Al llegar al control de pasaportes de Vietnam, el guia que llevamos recoje los pasaportes, los dolares del visado y nos quedamos a la espera hasta que nos hacen subir de nuevo a la barca para a poca distancia parar en la frontera de Camboya.

Pasamos todos por el  control de visado y tuvimos que esperar más de una hora a que llegara nuestro nuevo barco. Una lancha más grande, con un espacio al aire libre mayor y con sillas para disfrutar, más si cabe, del entorno de las 3 horas largas que nos quedaban de trayecto.

Al rato de salir nos dan el supuesto tentempié que incluia el viaje: un panecillo de pan mondo y lirondo, un plátanito y un agua, jajaja...vaya chollazo...Suerte que como siempre llevamos algo, complementamos el almuerzo.

Fotos,  comentarios del entorno, alguna siestecilla,...y por fín vemos a lo lejos Phnom Penh. Antes por el rio vimos un puente enorme en plena construcción, vacas por la ribera, varios barcos de carga, pueblitos monísimos, templos camboyanos, ....

La entrada en la capital de Camboya es chulisimo hacerlo desde el barco, pues tienes una gran prespectiva del frente marítimo, se ven los tejados del  Palacio Real y de las pagódas, un montón de banderas en el paseo, bares, restaurantes...mucho ambiente.

Como la lancha nos deja en pleno centro tardamos 10 minutos en llegar andando a nuestra Guesthouse. Salimos a cenar algo al Night Market y prontito a dormir.

Mañana tenemos dia de visitas por la ciudad.