Zinacantán y San Juan Chamula.

La visita a estas dos comunidades cercanas a San Cristobal forman parte de los atractivos locales pues las dos poblaciones mantienen arraigadas  tradiciones y costumbres prehispánicas y su población es indígena descendientes de los mayas. Asimismo su sistema de gobernación es autónomo del estado, no hay policia y todo se rige por decisión y orden de los mayordomos ( autoridad local).

Primero fuimos un día a Zinacantín y debido a lo que habiamos  leido sobre el lugar dejamos la cámara en casa, ¿ por qué?; resulta que en esta población no es que esté prohibido solamente hacer fotos en el interior de la iglesia sinó que también al pueblo y sobretodo a sus habitantes pues creen que con las fotos se les roba una parte de su alma. La gente que no ha seguido esas normas han tenido problemas según leimos en algunos blogs y nosotros quisimos ser totalmente respetuosos con este tema ( cabe aclarar que como todo aquí hay sus excepciones y no es raro que algún local se ofrezca a una foto a cambio de dinero claro, algo que aún nos parece peor).

Tras tomar un colectivo cerca del mercado en pocos minutos llegamos al pueblo que está a unos 10 kms d distancia. El chófer nos dejó junto a la iglesia y lo primero que nos sorprendió fué que no habia apenas nadie, pocos locales y menos turistas. Sabiamos que teniamos que sacar un ticket para entrar a la iglesia en una oficina turística, pero no la encontrábamos ni siquiera con las indicaciones de la gente y en una tiendita que entramos a buscar bebida nos dijeron que no teniamos que pagar nada para entrar, osea que media vuelta.

Antes de llegar a la iglesia se nos acercó una niña para invitarnos a ir a su casa a ver como tejen los bonitos bordados como los que ellas lucen en sus trajes tradiconales que usan a diario ( esa es una de las principales labores de las que vive la gente del pueblo además de plantar rosas). No teniamos mucho interés en ello pues sabemos que luego te dan la paliza si no les compras nada, osea que nos ahorramos el momento. Teniamos referencias que los niños no paraban de agobiar intentando vender algo o llevarte a su casa para ver como tejen pero la verdad es que quitando un par de timidos ofrecimientos más nadie nos dijo nada.

Llegamos así a la iglesia  de estilo colonial de San Lorenzo, la principal de las 3 que hay en el pueblo. A la entrada un gran cartel avisa de la prohibición de hacer fotos o grabar en video pero no habia nadie en la puerta, bueno ni nadie en el interior cuando entramos, tan solo un par de chicos limpiando de cera los lugares donde la gente deja sus velas. Al rato de estar allí se acercó uno de ellos a pedirnos el boleto, le explicamos la historia y nos dijo que era obligatorio, 15 pesos por persona.

Nos quedamos un poco frios al entrar al templo donde de entrada es un templo crsitiano con sus imágenes pero tiene varias particularidades: no hay bancos para sentarse pues los files rezan de rodillas, el suelo está cubierto de hojas de pino, hay muchas velas encendidas, los santos tienen espejos colgados en el su cuello y no hay altar ni retablos, las paredes están limpias. Todo tiene su motivo y su explicación según costumbred indigenas mayas y que este pueblo esta orgulloso de continuarlas.

Junto a esta iglesia se situa otra pequeña capilla en la que pudimos ver muchos hombres con ropas tradicionales, alferes y nichimes, que se cuidan de las flores y la vestimenta de lo santos. Aquí no nos pidieron nada para entrar y de hecho ellos iban a la suya, como si no estuvieramos.

Atravesamos el pueblo, que aunque en un precioso marco entre bosques y montañas no es un pueblo bonito, hasta llegar a la última de las iglesias, ésta bastante pequeña pero cuidada. Junto a las velas vimos que la gente deja pequeñas imágenes de animales, mulas y bueyes, pero oimos que las familias las dejan porque es tradicional pero no se sabe por que.

Como estábamos ya en la salida del pueblo nos acercamos a la carretera a esperar una combi para volver a San Cristobal. La casualidad quiso que nos dieramos de bruces con la oficina donde se paga el boleto de la iglesia!!!. De camino al centro del pueblo y viendo que no habia a quien ofender hicimos con el teléfono alguna fotillo.  Tomamos la combi y regresamos a casa tras una visita un poco light para lo que esperábamos, la verdad, pero bueno, todo es interesante.

Por la tarde noche salimos a dar una vuelta por el centro de la ciudad aprovechando que era Haloween; aquí hay una mezcla entre esa celebración y el Dia de Los Muertos, y a  la gente le encanta disfrazarse de algo tétrico, muy relacionado con el tema de la muerte. Vimos así montones de niños y jovencitos con la cara pintada a modo de calavera, mayores con algunos disfraces muy auténticos y hasta una tuna.

Cuando volvimos a casa hicimos nuestra particular celebración comiendonos un tradicional Pan de Muerto y tomando un chupito de mezcal con sal de gusano.....de ahí a la cama.

Al día siguiente, 1 de Noviembre, nos fuimos a ver la otra comunidad, San Juan Chamula, donde quedamos en encontrarnos con Mathilde y Charlie. De nuevo fuimos cerca del mercado a tomar la combi que en poquito rato, hay sólo 10 kms., nos dejó en la población, concretamente junto al panteón.

Esta vez si nos llevamos la cámara pero guardada en el bolsillo por si se daba la ocasión de usarla siempre que fuera adecuado. La etnia tzotzil de San Juan Chamula tiene algunas similitudes con la de Zinacantán pero se diferencian mucho en su vestimenta; las mujeres visten unas blusas brillantes y una falda de lana negra, mientras que los hombres llevan el chug, una chamarra de lana de borrego pero blanca.

Habiamos leido bastante sobre costumbres del lugar, igual hasta demasiado, pero cuando nos acercamos al panteón nos quedamos de piedra al ver como celebraba la gente el dia de Todos los Santos.  Las familias van a visitar a sus muertos al cementerio que están enterrados sin lápidas ni nichos, directamente el ataud en la tierra y una cruz de color, cubren el montículo con  hojas de pino, flores y depositan fruta y alimentos mientras ellos no paran de beber coca-cola pues la consideran la bebida de los dioses; esta les hace eructar y dicen que así se ponen en contacto con los espíritus de los difuntos. Los adultos mezclan esa bebida con posh, un  fuerte licor que obtienen con la fermentación del maiz o beben directamente cerveza, pero sin límite con lo cual no fué difícil ver a las 12 de la mañana gente completamente borracha e incluso algunos tirados por el suelo o entre las tumbas, allí es normal.

Pues si ver todo eso nos sorpendió, le sumamos las cajas y cajas de botellas entre las tumbas, la gente pasando por encima de ellas como si nada, gallinas y perros buscando que comer, o las familias comiendo usando las tumbas como asiento, ... faltaba el toque final: grupos de mariachis y bandas de norteños tocando a pié de las tumbas en honor de los difuntos, para nosotros algo impensable en nuestra cultura.

Allí nos juntamos muchos turistas mientras las familias cumplian sus rituales ajenos a todo eso, y aunque la mayoria guardamos cierta distancia de respeto vimos algunos que se pasearon por entre las tumbas e incluso hicieron fotos de primeros planos, cada uno que haga lo que quiera, pero no nos pareció muy correcto. Sobre las fotos, tema peliagudo, nos sorprendió ver gente con la cámara y que nadie les decia nada, es más, oimos a algunos guias que iban con sus grupos que les decian que no habia problema siempre que no se sacaran primeros planos o se hiceran fotos de cerca a las personas.

No vamos a negar que nos apetecia tener un retrato de la situación, y tomamos algunas fotos  generales rápidas, con discrección y guardamos la cámara de nuevo, todo ello a pesar de estar rodeados de gente que no perdia momento a retratar todo, ¿ a alguien le gustaria que eso fuera al revés, que estuvieras con tus difuntos en un día así y un extraño estuviera retratando el momento a todo detalle?.

Dimos una vuelta por el exterior del cementerio donde en su parte central se encuentra una antigua iglesia hoy en ruinas y nos dirigimos hacia el centro del pueblo para visitar la misteriosa iglesia de San Juan Bautista. Para ello primero tuvimos que pasar por la oficina donde pagamos el boleto de acceso, pasamos por el mercado que montan los domingos en la plaza central y llegamos a la entrada del recinto.

La iglesia de estilo colonial está rodeada de un muro y varias cruces verdes con diferentes significados: los 4 puntos cardinales, San Juan, San Pedro y San Pablo,...
En un kiosco situado en un lateral una serie de hombres, y sólo hombres,  vestidos con sus chamarras de borrego blanco, bailaban al son de unos músicos mientras otros frente a la iglesia hacian sonar las 3 campanas sin parar, y es que durante todo el día tienen que estar sonando.

Desde ahi fué donde pudimos tomar las fotos de la iglesia, pues dentro no está permitido de ninguna manera. Entregamos el boleto y pasamos a la misteriosa y esotérica iglesia donde dicen que hay una magia especial, una fusión de chamanismo maya y cristianismo.

De nuevo nos encontramos una iglesia sin bancos, con el suelo lleno de hoja de pino ( a modo de alfombra para la gente que va a orar) y muchos santos dispuestos a derecha e izquierda, todos con sus espejos colgando y cada uno con sus  muchas velas puestas por los fieles. Nos llamó la atención que en la parte principal del templo donde se situa la imagen del San Juan Bautista  ésta estaba tapada con una sábana, al igual que algunas otras imágenes cercanas.

Por el resto la iglesia estaba muy tranquila, no habia más que turistas, una sola señora local rezando en un rincón y ninguna actividad extraordinaria. En un lateral vimos un señor ataviado con su chamarra de borrego, esta vez negra, y que le preguntó a Carol si era mexicana, jajaja,.... no es la primera vez que se lo dicen. Le digimos que no que veniamos de Barcelona y nos sentamos junto a él a preguntarle el porqué de los santos tapados; nox explicó que era para que no vieran a los muertos, que se habian tapado ese día a las 9 de la mañana y no se destapaban hasta el día siguiente a las 2 de la tarde. El hombre era muy agradable pero no estamos seguros que estuviera " muy fino" por sus comentarios y respuestas a algunas preguntas que le fuimos haciendo, pero nos reimos mucho con él, fué interesante poder interaccionar con alguien local, algo que no es sencillo en este pueblo donde se palpa una pequeña tensión entre locales y visitantes. Nos dijo que era chamán y que si queriamos nos podia hacer una limpieza, le dimos las gracias por ello pero le dijimos que no nos hacia falta ( de todas formas a mi no me dejaba de pasar la mano por la espalda, igual algo me hizo sin yo saberlo, jajaja).

Estando con el señor entraron a la iglesia Mathilde y Charlie y esperamos a que dieran una vuelta por la iglesia mientras nosotros seguiamos expectantes  a la posible aparición de algún chamán para ver sus rituales; pero no, lo único que vimos fué el grupo de hombres que estaban bailando fuera que entraron a rezar a la iglesia durante unos minutos y se fueron.

Visto lo visto y un poco decepcionados porque esperábamos sentir algo allí dentro más especial, con  más energia, salimos de la iglesia. Sorpresa!!!!...estaba cayendo una tormenta de las buenas osea que nos refugiamos en la entrada mientras veiamos a los mayordomos que bajo la lluvia no dejaban de tocar la campana. Otros se refugiaron junto a nosotros y habia un par que mirarlos a los ojos sí que nos impactó pues estaban fuera de las órbitas, no sabemos como podian aguantarse de pié y apenas podian articular palabra. Uno de ellos solo hacia que decirnos: aguaaaaa, waaaater, aguaaa, waaaater...en referencia a la lluvia...muy surrealista, osea que en cuanto amainó un poco nos fuimos.

Volvimos a cruzar el pueblo para acompañar a nuestros amigos hasta el cementerio pues ellos no habian ido. Con la lluvia había mucha gente que ya se habia ido pero aún quedaban algunas familias comiendo y bebiendo junto a sus difuntos.

De un bar junto al cementerio nos empezaron a llamar unos locales a gritos en un poco comprensible inglés ( mania de dar por hecho que todos los extranjeros somos angloparlantes) pero nos hicimos los locos. Entonces uno de ellos se levantó y vino hasta nosotros dando  eses para invitarnos a tomar una cerveza, todo ello en inglés; nosotros en un claro castellano le dijimos que muchas gracias pero que no, que ya nos ibamos; el hombre, de nuevo en inglés, que si no queriamos cerveza podiamos beber una soda...que no, gracias, que no...y él dale y dale en inglés que sí, que una soda....imaginar como iba que no se enteró que le hablabamos en castellano!!!.

Como el día estaba muy fresco y volvia a llover decidimos que era hora de volver a San Cristobal y nos fuimos al centro del pueblo a tomar las combis. Allí de nuevo otro se nos enganchó hablandonos de nuevo en inglés ( no sabiamos que queria porque era imposible entenderle) pero si nosotros andabamos más rápido él hacia igual, si ibamos más lentos, se paraba...hasta la puerta de la furgoneta se vino y no subió porque el chófer no le dejó, sino con nosotros se viene.

En el camino de regreso fuimos hablando de todo lo que habiamos visto y vivido allí, según Carol todo aquello era una tomadura de pelo, que quitando que iban borrachos allí no habia nada especial. Yo no lo veo igual que ella, supongo que era un día con una celebración muy específica y que eso hizo que la iglesia estuviera más tranquila, que todo lo demás son costumbres que han ido pasando de generación en generación, y cuando preguntas el porqué de algunas cosas su habitual respuesta es que es una tradición y siempre se ha hecho así.

Ya en San Cristóbal nos fuimos a comer ( alguna hizo una siestecilla mientras  yo escribia el blog) y quedamos con nuestros amigos para vernos por la noche y tomar una cerveza.

Cuando nos encontramos de nuevo dimos una vuelta por las calles peatonales de la ciudad donde como el día anterior vimos gente disfrazada, niños pidiendo dulces con sus calabazas y un grupo de chavales paseando un ataud por las calles todos con máscaras a cual más tenebrosa.

Nos sentamos en una terracita a tomar unas micheladas y estuvimos de charla, incluso Charlie se animó a hablar en un castellano que va mejorando día a día, ánimo!!!.

Aunque ellos van en unos días a Palenque, nuestro siguiente destino, es probable que ya no volvamos a coincidir osea que nos despedimos no sin antes desearles mucha suerte en su viaje centro y suramericano, aún les quedan muchos meses de viaje, que sana envidia. Fue un placer conoceros chicos!!!.

La última mañana en San Cristóbal la dedicaremos a hacer la bolsa, dar una última vuelta y tomar el bus a Palenque a primera hora de la tarde. Las próximas aventuras os las contamos desde allí.