martes, 11 de noviembre de 2014
Dos dias en Hangzhou
La llegada a esta ciudad, conocida sobretodo por su gran lago, fue a pronta hora de la mañana después de un viaje de 20 horas en tren. Teniamos la esperanza que nos dieran la habitación pronto para descansar un poco, pero no, hasta las 12 nada...total que desde las 8.30 que eran, nos tocaba hacer tiempo. Dejamos las bolsas y fuimos lo primero de todo a desayunar, unos buenos noodles calentitos, y tras ello a deambular por las calles cercanas al hotel.El barrio es un lugar de gente obrera, normal, nada turístico, pero ves la verdadera vida de la gente y su entorno, y gracias a ello dimos con un mercado de alimentación que nos encanto por lo auténtico que era, y por los alimentos tan diferentes que tenian.
Pescados curiosisimos, verduras y frutas que no eramos capaces de saber que eran, carnes expuestas sin refrigeración, un festival de colores y olores, que se vió aún más animado cuando Carol le hizo la foto a un tendero y todos los del alrrededor vinieron a ver la foto, fuimos los animadores del momento, además de la distracción, porque mucha gente de fuera como nosotros, nos da que no va por allí.
Total, que entre una cosa y otra, una calle y otra volvimos al hotel y ya teniamos habitación!!!
Descansamos un ratillo para salir más tarde hacia una conocida calle peatonal llena de tiendas y lugares de restauración. Por el camino vimos un mercadillo muy animado donde Carol compró, con regateo incluido, unos calcetines " pura lana virgen", para los días de más frio. Sin buscarlo fuimos a dar con la torre del tambor, y entramos, era gratis!!!
Desde allí empezaban toda la zona peatonal...muchas tiendas, muchos puestos de comida, mucha gente, pero nada especial para nosotros, son calles animadas, pero no nos llaman demasiado la atención, a lo sumo unas farmacias de medicina china tradicional muy antiguas, y muy bonitas, que conservan sus mobiliarios y que a Carol, por defecto profesional le encantaron. Después de cenar, y con el cansancio acumulado, bus de vuelta al hotel y a descansar, que el día siguiente nos tocaba seguir visita.
Despertador que suena pronto augura un día completito. Desayuno y a la calle. La primera labor de la jornada era ir a comprar los billetes de tren para ir a Suzhou, siguiente destino. La verdad es lo de comprar los billetes cada vez lo tenemos más por la mano, pim, pam...5 minutitos esta vez. Al salir un bus nos llevaba directos al recinto del Templo de Linyin...madre mia como iba el bus, como sardinas, pero chinas, y todos al mismo destino, osea que 45 minutos, con atasco incluido, para llegar.
El complejo a visitar lo forman unos jardines con unas grutas y esculturas en piedra preciosas, que rodean el Templo de Linyin, el principal, y dos templos más. Primero compras la entrada que da derecho a visitar todo menos el citado templo, que se paga aparte.
Las grutas y toda las paredes donde están esculpidas las figuras de budas son alucinantes, y algunas muy bien conservadas. El entorno con jardines y un arroyo, geniales, nos encantaron.
La idea era entrar luego al Templo de Linyin, el más reconocido de los tres, pero desistimos, es muy grande, nos quitaba mucho tiempo a lo que queriamos hacer después, habia que volver a pagar otra entrada...total, que visitamos el de Youngfu, que está ahí mismo, y entraba con la entrada. Es un templo que se accede a sus pabellones subiendo por un ladera, la visita ha estado bien, el solecillo se ha dejado ver por instantes, hemos comido nuestro picnic a la vera de unos cultivos de te,...que más se puede pedir!!
Retrocedemos cruzando de nuevo los jardines y cogemos el bus, casi igual de lleno que a la ida, para ir a visitar el lugar emblemático de Hangzhou, el Lago del Oeste. Es un lago enorme, con un camino que lo bordea por completo, barcas para navegar por él, ...y varios caminos con islotes que lo cruzan. Pena que el día volvióa ser gris y con esa neblina que nos acompaña casi cada día ultimamente. Aunque el lago es precioso, su entorno no ze adivinaba a ver bien a larga distancia por la neblina, pero a la vez le daba un toque...especial.
Caminar al lado mismo del agua por el lago es un lujo, sobretodo en las zonas más alejadas del tráfico, donde solo se puede pasar andando o en bicicleta. Es una zona muy tranquila donde pasea mucha gente, con las barcas que buscan clientes y los puestos de comida y bebida, pero donde no te agobian ofreciendote sus servicios. Un banquito al pie del agua nos ha servido de zona de relax durante un buen rato, parecia que estaba anocheciendo por lo oscuro del día y sólo eran las 15.30h.!!!
Regresando al camino, pasamos por una zona donde es habitual que haya gente cantando opera, en chino,...los hemos visto en otros parques,...la verdad es que suelen pornerle mucha voluntad, pero como desafinan la mayoria, jajajaja...
Camina que camina, y dejando ya el lago aparte, hemos tomado camino del hotel pensando en cenar algo antes de llegar, y es que aquí cenamos muy pronto, como ellos, y hemos vuelto a pasar por el mercadillo del día anterior; estaba vez tocaba comprar fruta, y a lo grande, la oferta eran mandarinas 2,5 kg. por 5 yuanes, unos 80 centimos de euro, osea que ahora mismo tenemos en la habitación una buena bolsa de mandarinas para mañana.
Después de cenar llegamos por fín al hotel, menuda caminata nos hemos dado hoy. Mañana traslado a Suzhou, tren de poco más de 2 horitas, que corto se nos va a hacer.
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Increible la foto de los cables. Por la que parece pocos turistas se mueven por allí y llamais la atención.Poco a poco con la cantidad de fotos recibidas nos vamos integrando en vuestro viaje por China
ResponderEliminarTuristas no chinos se ven pocos, muy pocos, y más que nada en lugares muy turísticos como templos o zonas comerciales, y a la que te sales de esas zonas, te mueves en transporte público o entras a comprar en supers de barrio, pues eres el foco de las miradas, ..nos hace mucha gracia, y si te dicen " hello", les contestas y se parten de risa.
ResponderEliminarLas fotos elegimos algunas de las que más nos gustan, pero tenemos un montón!!
La verdad es q no paro d mirar ojiplática todo, pandas, monos, paisajes, templos, esculturas, mercados.. ufff desde luego que envidio (sanamente) vuestra experiencia, que.maravilla, gracias x compartirlo con nosotros!!!!! ;)
ResponderEliminarGracias Merçé, por cierto cuantas Merçés por el blog, jajaja...la verdad es que cada día nos depara cosas y experiencias increibles, y más en un país tan grande y diverso. Encantados de compartirlo con todos!!!
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