Kayak y playa en Cat Ba

Con el día tan soleado que se nos presenta decidimos aprovecharlo con una de las actividades que no queriamos perdernos en Cat Ba: alquilar un Kayak y recorrer Ha Lan Bay.

Al sur de la Isla de Cat Ba se encuentra esta bahía, similar a Halong Bay por las formaciones rocosas, pero más pequeñas y juntas, con varias playas en algunos de los islotes. Además la circulación de barcos es mucho menor, por lo que es muy tranquila, y con la poca gente que hay en Cat Ba prometia una experiencia a lo Robin Crusoe.

Vamos andando desde el hostel al puertecito de Ben Beo, donde alquilan los kayaks, 20 minutitos, y al llegar nos encontramos aquello muy desierto...mejor!!.

Un lugareño nos señala que vayamos hacia los restaurantes flotantes de al lado a alquilar la canoa ( ya sabiamos que allí es donde más baratas las tienen), y nos acabó acompañando. La señora encargada, tras un a serie de regateos del precio, accedió y nos dió los remos, los chalecos, un mapa de los islotes y una bolsa de plástico para la mochila. Al rato ya navegábamos por unas aguas bastante tranquilas, y más solos que la una.

Nos indicaron que fueramos primero dirección a la Monkey Island, un islote muy conocido allí pues viven monos, tiene playas grandecitas y algún resort, pero nos apetecia un plan más privado.

Remando rodeados de aquellas moles de piedra te sientes muy pequeñito, pero es impresionante. Nos pasa algún barco de turistas, algún barquito de pescadores, y un kayak como el nuestro...pero la sensación de calma y tranquilidad es absoluta.

Es muy curioso porque delante nuestro veiamos formaciones rocosas enormes, que a medida que te acercas ves que realmente son dos o tres separadas, con alguna playita desierta.

Después de un buen rato remando y disfrutando del entorno, vemos a lo lejos una playita que da a los dos lados de una de las rocas..vamos a por ella. Aquello o estaba muy lejos, o a nosotros se nos hizo eterno!!.

Finalmente bajamos del kayak y nos encontramos solos en una playita de coral monísima que daba a los dos lados de las rocas, un lado más tranquilo y sosegado, y al otro con fuerte viento y mar más brava...aquello era el paraiso!!!!.

Dejamos nuestras cosas en la arena, nos pusimos el bañador y al agua...pero bañador¿ para qué?....con lo que cuesta luego que se seque...al agua en pelotiquis!!!!.
Realmente fué un entrar y salir, porque estaba bastante fría, pero pensar que a 18 de diciembre estamos en Vietnam bañándonos y tomando el sol, nos hace sentir muy afortunados. Ya con nuestros pareos puestos nos dedicamos a hacer unas fotos dignas del lugar...bien lo merecian.

Y con tanto deporte el hambre llamó a nuestra puerta. Bocata con salchichas vietnamitas  de ternera, naranja y mandarinas...nos supo a gloria. Ya sabemos que el mundo es libre y de todos, pero vamos, que con 50.000 islotes que hay en la zona y múltiples playas, que justamente dos kayaks con unos chicos jóvenes pararan allí, tiene guasa. Cierto es que se quedaron en la otra punta, y sólo uno se acercó a preguntarnos si sabiamos cual era Monkey Island....si hubieran llegado 20 minutos antes igual no se hubieran parado al ver a dos zumbados bañándose, pues ellos no lo hicieron.

En aquel momento de paz y relax a Carol se le vino a la mente un momento SUPERVIVIENTES EN VIETNAM: " que pena no tener nuestras cosas para quedarnos aquí instalados varios días"... ciertamente el lugar invitaba a ello.

Nos dió mucha pena irnos de allí, pero antes de las 5 de la tarde había que devolver la canoa, y nos quedaba un buen trecho de vuelta.

Cambiamos de camino, pues a la ida vimos que habiamos dado mucha vuelta; pasamos por rocas preciosas con agujeros, y por un pueblo flotante de pescadores alucinante y enorme. El día antes habiamos visto uno desde el barco en Halong Bay, pero este lo vimos de muy cerca y parece mentira que la gente haga su vida ahí.

Devolvimos la canoa y nos fuimos de vuelta hacia el pueblo. Nos habiamos llevado ropa de recambio, pero la bolsa donde metimos la mochila debia tener algún poro y teniamos todo empapado, osea que tal cual de camino al pueblo.

Poco antes de llegar al hostel nos encontramos a Amanda y su madre que venian en moto de dar una vuelta por la zona y del Parque Natural del centro de la isla. Nos fuimos rápido porque estábamos empapados, luego nos vemos!!!!.

Al llegar ducha bien caliente y lavado de toda la ropa. De ahí a cenar.

Dimos un paseo por el frente marítimo y nos encontramos en la terraza de su hotel a Anda, Amanda y Carmen, la chica de Málaga que conocimos en el barco. Nos contamos nuestro día, y planeamos la posibilidad de encontrarnos todos en los días de Navidad. Nos intercambiamos teléfonos, mails, etc. y quedamos en ir hablando.

Estando en la terraza se acercó un chico jóven, el manager de su hotel, y le estuvimos preguntando precios para ir a Ninh Binh, pues los hoteles venden de todo. Luego llegó otro señor y me dice que si quiero un pequeño masaje, y cuando me doy cuenta el tipo ya estaba dale que te pego...pues si que lo hace bien, sí. Mientras las mujeres se reian de mí, ante la situación esperpéntica, y Amanda acababa de ver en su tablet una peli de Srek, el masajista me da una tarjeta suya y me dice que va a los hoteles a hacer masajes cuerpo entero una hora a 7 $, coje su moto y se va, jajaja...

Se hace tarde y decidimos volver al hostel, en la calle ya no queda nadie, y siendo las 11, pafff...se apagan las luces del alumbrado público..osea que cada uno a su casita.

Ha sido un día excepcional...cám on ( gracias) Vietnam.